¿Hay esperanza para los pacientes con cáncer diseminado?
El cáncer diseminado tiene peor pronóstico, aunque no siempre se asocia a corta supervivencia. Algunos tipos poco frecuentes de cáncer avanzado y diseminado todavía se pueden curar. Muchos tumores metastáticos del adulto son incurables, aunque la evolución no es uniforme o previsible, la supervivencia generalmente es incierta. La supervivencia puede ser muy prolongada en algunos casos y no se puede dar una expectativa real.
Hace unos años un científico, Steven Gould, diagnosticado de un tumor maligno con una supervivencia esperable de pocos meses, escribió un breve artículo dirigido a enfermos con cáncer señalando que los médicos dan cifras de supervivencia basadas en la estadística y por lo tanto apuntan como verdadero un valor que es el promedio, o la mediana. Sin embargo la realidad es que hay casos extremos hacia arriba y hacia debajo de la mediana, y que un enfermo particular difícilmente es el promedio, sino que corresponde a uno de los valores hallados en la serie, con un rango muy amplio de posibilidades. Steven Gould vivió después más de 20 años y llevó una vida muy productiva antes de morir debido a otro tumor maligno de nueva aparición no relacionado con el anterior.
Por este motivo, frente al diagnostico de cáncer diseminado hay que mantener una actitud abierta sin poner plazos a la vida, luchar mientras sea posible y valorar todas las alternativas que más convienen en cada caso. Los avances recientes han abierto nuevas vías de tratamiento y hay razones para ser optimistas. De hecho actualmente hay pacientes que reciben tratamientos para cáncer en recaída que no existían en el momento en que fueron inicialmente diagnosticados.